el animal más bello del mundo

Cuando era pequeña, digamos, con 6 o 7 años, mis recuerdos cinematográficos se reducen a unas cuantas películas. A medida que pasan los años mi memoria, que funciona como la de un pez, se olvida cada vez de más cosas. Sin embargo, hay detalles insignificantes que permanecen intactos. Recuerdo perfectamente ir a casa de unas amigas de mi familia, a las que quiero como a mis hermanas. Ellas eran más mayores que yo, tenían 14 años y sin embargo siempre jugaban conmigo. Muchas veces me quedaba a dormir en su casa. Para mí era toda una novedad. Hasta me dejaban ver la tele con ellas hasta tarde, toda una aventura cuando eres una enana! Pues bien, recuerdo perfectamente estar las tres en cama y ver "Mogambo", una de sus películas favoritas. Tengo los fotogramas de esa peli grabados en la cabeza. Y también recuerdo como si fuera hoy el impacto que me causó el personajes de Ava Gardner, con aquella belleza que para mi corta edad, no se podía comparar a la de aquella rubia sosa llamada Grace Kelly, cuya fama yo desconocía en aquel momento. Me pregunto si la habéis visto , qué os parece la película y si os trae algún recuerdo en particular como a mí. Un beso

la has visto?

Estos días no me puedo quitar la melodía de Moon River de la cabeza. La escuché por accidente y ahora no dejo de tararearla. "Desayuno con diamantes" es una película especial, pero hoy quería hablar de mi película favorita de esa época: "El apartamento". Si no la habéis visto, ¿ a qué esperáis? Aquí no voy a describir el argumento, sólo daros razones para los que no la han visto:
Jack Lemmon es una de ellas. SI has visto "Con faldas y a lo loco" tienes que ver esta película, está magnífico. La otra razón es su compañera de reparto, Shirley Maclaine, que también está sublime, aunque para mi gusto brilla más en "Irma la dulce".
Estos dos actores tienen una química especial q traspasa la pantalla. Hace años que no veo esta película y me estoy replanteando seriamente volver a verla en cuanto acabe de hacer los exámenes. Es una película que camina entre el umbral de la comedia y el drama. Te ríes con el protagonista, sus torperzas y su mala suerte son indescriptibles, pero al mismo tiempo empatizas con él y sientes una especie de compasión, porque el mundo laboral en el que el personaje tiene que desenvolverse no es el más justo. Y ahí es donde entra la no comedia. Todos asentimos con la cabeza cuando vemos como el pobre tiene que transigir ciertos comportamientos si desea ascender en su trabajo. Todos sabemos que esas situaciones existen todavía hoy, cada uno lo podemos aplicar a nuestra manera. En ese sentido, la trama es atemporal.
Como no quiero desvelar nada más por si alguien que no ha visto la película lee esto voy a terminar con una diálogo que aparece en el largometraje:

"El espejo... se ha roto". "Ya lo sé, me gusta así. Así me veo tal y como me siento"

Detalle curioso: no dejéis de fijaros en el utensilio que el personaje de Jack Lemmon utiliza para escurrir la pasta.